En el mundo empresarial, los contratos de prestación de servicios son una herramienta imprescindible para garantizar el pago, pero también para evitar malentendidos y protegerse ante cualquier imprevisto.
Sin embargo, cuando no estamos muy familiarizados con ellos, es normal que surjan dudas. ¿Qué datos deben incluir? ¿Hasta cuánto pueden durar? ¿Cómo deben firmarse? A continuación, te explicamos cómo gestionar todos tus contratos para que puedas tenerlo todo organizado y evitar fraudes y problemas legales innecesarios.
¿Qué es un contrato de prestación de servicios?
Un contrato de prestación de servicios es un documento legal en el que una persona (física o jurídica) se compromete a realizar una actividad o servicio específico para otra, a cambio de una compensación económica previamente pactada. Protegiéndonos cuando ofrecemos un servicio profesional o contratamos a alguien para que lo haga.
Este documento define las reglas del juego: qué se va a hacer, cómo, cuándo, dónde y por cuánto dinero. Y lo más importante: qué pasa si algo sale mal. Con lo cual, ambas partes pueden tener claro desde el principio cuáles son sus derechos y obligaciones.
Un tipo de contrato que es especialmente frecuente en áreas como:
- Servicios técnicos: reparación, instalación, mantenimiento, etc.
- Servicios profesionales: asesorías, formación, consultoría, informática, etc.
- Servicios personales: guías turísticos, animadores y ayuda a domicilio (excepto personal doméstico).
- Proyectos puntuales: diseño gráfico, desarrollo web, creación de contenido, etc.
¿Qué datos debe incluir un contrato de prestación de servicios?
A continuación, mencionamos cuáles son los elementos esenciales que todo contrato de prestación de servicios debe incluir:
1. Identificación de las partes
Debe constar claramente quién presta el servicio (nombre, NIF y domicilio) y quién lo recibe. Si hay representantes, también deben figurar sus datos.
2. Objeto del contrato
Debe especificarse en detalle cuál es el servicio que se va a prestar. No basta con poner “asesoría” o “consultoría”, hay que detallar las tareas concretas. Por ejemplo, “asesoría contable mensual para la presentación de modelos trimestrales de IVA e IRPF”.
3. Duración del contrato
Debe indicarse cuándo empieza y cuándo finaliza el servicio. Pero también pueden incluirse cláusulas de renovación o de cancelación anticipada, siempre por escrito.
4. Condiciones económicas
Incluye el precio total o por hora, forma y frecuencia de pago (mensual, por hitos, etc.), si incluye IVA u otros impuestos, y plazos para abonar las facturas.
5. Obligaciones de las partes
Tanto el prestador como el cliente deben asumir ciertas obligaciones y deben quedar perfectamente reflejadas.
6. Confidencialidad y protección de datos
Muy importante, sobre todo si se maneja información sensible. Es recomendable incluir una cláusula específica conforme al RGPD y apoyarse en herramientas de procesamiento inteligente de documentos que permitan garantizar la seguridad de los datos.
7. Incumplimientos y penalizaciones
Aquí se fijan las consecuencias y posibles indemnizaciones en caso de que una de las partes no cumpla.
8. Firma de ambas partes
Sin firma no hay contrato. Asegúrate de que ambas partes firmen cada página y conserven una copia.
Cláusulas adicionales recomendadas
- Ubicación del servicio.
- Herramientas o materiales necesarios.
- Condiciones de subcontratación.
- Forma de resolver conflictos (mediación, arbitraje o vía judicial).
¿Cuánto tiempo puede durar un contrato de prestación de servicios?
La duración de este tipo de contrato depende directamente del servicio que se va a prestar. Puede ser:
- Por proyecto cerrado: diseño de una web, instalación de un sistema, creación de una campaña publicitaria, etc.
- Por periodo determinado: mantenimiento durante seis meses, asesoramiento trimestral, etc.
- Renovable automáticamente: con cláusulas que indiquen prórrogas tácitas si ninguna de las partes manifiesta lo contrario.
Según la normativa española, los contratos de prestación de servicios no deben superar los tres años. No obstante los convenios colectivos pueden ampliarlo hasta cuatro años. Además:
- No se pueden encadenar más de tres contratos temporales consecutivos.
- No pueden sumarse más de 24 meses de contratos en un período de 30 meses.
Si se incumplen estas condiciones, la relación pasará a considerarse indefinida por ley, con todos los derechos laborales que ello implica.
¿Cómo firmar un contrato de prestación de servicios?
La forma de firmar un contrato ha cambiado mucho en los últimos años. En la actualidad, ya no es obligatorio imprimir, firmar y escanear. Existen dos formas válidas:
Firma tradicional
Se imprimen dos copias, se firman manualmente y cada parte se queda con una. Sigue siendo bastante habitual, aunque algo más lenta y menos práctica si hay distancia geográfica de por medio.
Firma electrónica
Rápida, segura y legal. Se puede firmar desde el móvil, el ordenador o una tablet, sin desplazamientos ni papeleos. En España, existen diferentes niveles de firma electrónica reconocidos por la Ley 6/2020.
Las herramientas de firma electrónica de contratos permiten incluso llevar control del proceso: saber quién ha firmado, cuándo lo ha hecho y enviar recordatorios automáticos.
Imagina, por ejemplo, que contratas a un desarrollador freelance de otra ciudad para que cree tu tienda online. Puedes enviarle el contrato por email, firmarlo digitalmente y comenzar el proyecto.
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En definitiva, tener tus contratos de servicios profesionales bien redactados y correctamente gestionados te permitirá ofrecer tus servicios con seguridad y confianza, y gracias a herramientas como LexDoka, podrás tener siempre la máxima tranquilidad.
