La industria de Alimentos y Bebidas a nivel global se enfrenta a las exigentes preferencias de los consumidores que cambian con rapidez, a fusiones y adquisiciones, presiones regulatorias y de sustentabilidad, mayores costos de ingredientes y mano de obra y mucho más. Al mismo tiempo, hay muchos avances importantes en la cadena de valor, en las prácticas agrícolas, el procesamiento de alimentos, la tecnología de fabricación y embalaje, el transporte y más.
Estas empresas están lidiando con una competencia que evoluciona rápidamente, con cadenas de suministro mundiales dinámicas y con reglamentos cambiantes. Para seguir siendo competitivos, las empresas deben ser más ágiles y mantenerse cerca tanto de sus clientes como de sus proveedores. La industria Alimentos y Bebidas se enfrenta a un amplio conjunto de desafíos contractuales que abarcan la contratación de distintos tipos de proveedores de bienes y servicios, las ventas y los contratos corporativos. Si no se abordan, estos desafíos tienen el potencial de conducir a mayores costos de adquisición, costosos incumplimientos y clientes insatisfechos.