El surgimiento de Bancos Digitales y el aumento de la supervisión están transformando la interacción de la banca y los servicios financieros con clientes, proveedores y gobiernos, siendo los contratos fundamentales en estas relaciones.
Abordar estos desafíos es crucial para evitar desventajas competitivas, contratos menos efectivos y riesgos reglamentarios para las empresas financieras.
El proceso de incorporación de proveedores, canales y clientes está fragmentado y carece de estandarización, lo que dificulta el cumplimiento de las estrictas regulaciones del sector.
Los departamentos de riesgo carecen de un control adecuado sobre las variaciones en los umbrales de crédito y riesgo establecidos en los contratos, debido a los métodos de contratación aislados e incoherentes.
Los procesos manuales de gestión de contratos, que son intensivos en mano de obra, impiden que los términos negociados fluyan automáticamente a los sistemas financieros de las empresas, lo que afecta la productividad y aumenta el riesgo de errores.
Procesos estandarizados y centralizados para la incorporación de proveedores, canales y clientes, lo que garantiza el cumplimiento de las estrictas regulaciones del sector.
Control adecuado sobre las variaciones en los umbrales de crédito y riesgo establecidos en los contratos, asegurando que los departamentos de riesgo tengan visibilidad y control sobre estos aspectos críticos.
Eliminación de procesos manuales intensivos al permitir la generación automática de contratos mediante la utilización de matrices validadas y cargadas, lo que aumenta la eficiencia y reduce el riesgo de errores.
