Phantom Shares: qué son y cómo funcionan

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En el mundo empresarial contemporáneo, cada vez más compañías están recurriendo a sistemas de incentivos para atraer y retener a los mejores talentos. Uno de estos sistemas son las «Phantom Shares» o «acciones fantasma». ¿Pero qué son exactamente y cómo funcionan? 

¿Qué son las Phantom Shares?

Las Phantom Shares son una forma de compensación que las empresas ofrecen a sus empleados, que simula la propiedad de acciones de la compañía sin que el empleado llegue a ser realmente propietario de las mismas. De este modo, los empleados pueden beneficiarse del crecimiento y éxito de la empresa, como si fueran accionistas, sin tener que comprar acciones reales.

Este tipo de incentivo es especialmente popular en startups y empresas emergentes que pueden no tener suficiente liquidez para ofrecer salarios competitivos, pero que desean atraer y retener a los mejores talentos. Las Phantom Shares también pueden utilizarse como una forma de motivar a los empleados a trabajar en pro de los objetivos a largo plazo de la empresa, ya que su valor está directamente relacionado con el rendimiento de la empresa.

¿Cómo funcionan las Phantom Shares?

El funcionamiento de las Phantom Shares es sencillo: una vez que se otorgan a un empleado, se «maduran» durante un período de tiempo determinado, conocido como el período de consolidación. Una vez transcurrido este tiempo, el empleado puede «vender» sus acciones fantasma de vuelta a la empresa a cambio de un pago en efectivo equivalente al valor de las acciones reales de la empresa en ese momento.

En España, la tributación de las Phantom Shares se realiza como rendimientos del trabajo en el IRPF, en el momento en que se hace efectivo el cobro. Por lo tanto, aunque no se poseen acciones reales, el beneficio obtenido se considera como un salario y se graba en consecuencia.

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