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Elementos esenciales de un contrato
¿Cuáles son los elementos esenciales de un contrato?
Los elementos esenciales de cualquier contrato son aquellos que deben concurrir para que el contrato sea eficaz y produzca los efectos jurídicos que las partes pretenden.
Así, explicados de forma sucinta y general, son los siguientes:
- Consentimiento de los contratantes: se basa en la manifestación de voluntad de las partes de obligarse mutuamente. El consentimiento debe ser libre, informado y coincidente.
Por ejemplo, Ana y Carlos acuerdan celebrar un contrato de compraventa de un coche usado. Ambos participantes expresan su voluntad de llevar a cabo la transacción y están de acuerdo con los términos y condiciones establecidos en el contrato. Ambos firman el documento de compraventa, lo que demuestra su consentimiento mutuo para celebrar el contrato (Como norma general no es estrictamente necesaria la firma, pero ayuda a probar el efectivo consentimiento).
- Objeto: Se refiere al contenido de la prestación o la cosa sobre la que recae el contrato. Es decir, lo que las partes se comprometen a hacer o entregar. El objeto del contrato debe ser lícito, posible de cumplir y determinado o determinable.
Por ejemplo, Ana se compromete a vender el coche a Carlos, mientras que Carlos se compromete a comprarlo y pagar el precio acordado. El coche y su entrega física son el objeto tangible del contrato.
- Causa: Es el motivo o finalidad por la cual las partes celebran el contrato. La causa debe ser real, lícita y no contraria a la ley, la moral o el orden público.
Por ejemplo, Ana quiere vender el coche para obtener el precio acordado, mientras que Carlos quiere comprarlo a cambio del pago acordado. Ambos tienen una razón válida y legítima para celebrar el contrato.
En algunos casos, también puede ser necesario cumplir con un requisito de forma, que es el modo de exteriorizar el contrato. La forma puede ser verbal, escrita o solemne, según lo exija la ley o lo pacten las partes.
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