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La prescripción extintiva
¿Qué es la prescripción extintiva?
La prescripción extintiva es una forma de extinción de los derechos y las acciones por la inacción del titular de los mismos durante el tiempo determinado por la ley.
No extingue el derecho, sino la acción. Esto significa que, aunque el derecho en cuestión sigue existiendo, la persona que tenía la posibilidad de ejercer una acción legal para hacer valer ese derecho ya no puede hacerlo una vez que ha prescrito.
La prescripción extintiva tiene requisitos y plazos que varían según el tipo de derecho y de acción. Algunos ejemplos de plazos son:
- Las acciones reales sobre bienes muebles prescriben a los seis años de pérdida de la posesión.
- Las acciones reales sobre bienes inmuebles prescriben a los treinta años.
- Las acciones personales que no tengan plazo especial prescriben a los cinco años desde que pueda exigirse el cumplimiento de la obligación.
- Las acciones derivadas de delitos o faltas prescriben a los cinco años para los delitos graves, a los tres para los menos graves y al año para las faltas.
Para que se produzca la prescripción extintiva, es necesario que el titular del derecho no haya ejercitado ninguna acción judicial o extrajudicial para reclamarlo, ni haya reconocido expresamente su existencia.
Si se interrumpe, se vuelve a contar el plazo desde cero.
La prescripción extintiva no se aplica automáticamente por la Administración de Justicia (de oficio). Es responsabilidad del beneficiario del derecho alegarla y demostrar que ha prescrito.
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